sábado, diciembre 26, 2009

Una mezcla...


Vivimos en un mundo materialista desprovisto de moral, las leyes que nos rigen no son morales. La bondad no aparece en sus líneas. Un mundo edificado sobre el robo, la competición, la explotación, el egoísmo... Todo está diseñado para impedir que la conciencia del hombre se desarrolle, porque la conciencia molesta, trastorna. Mantienen a la gente en un nivel lejano a la toma de conciencia: un nivel que impide al mundo cambiar. Es una sociedad criminal que destruye al ser. Es la conspiración contra el despertar. Un mundo que quiere que seamos compradores frustrados.
¿Qué hacer?
Ocuparnos de crear una nueva moral que nos permita alcanzar la conciencia colectiva. Una moral que no tenga como fundamentos las nociones de bien o mal, sino de la belleza... Soy muy conciente de que se trata de un trabajo sin fin porque uno siempre podrá encontrar una belleza mayor.
Una manera de prodecer que no pertenezca a ninguna escuela.
Vivimos aterrados. Parace que sobre todo nos ahoga el pavor económico... Queremos seguridad, estabilidad, estabilidad económica, estabilidad emocional.
La vida es movimiento, no es estabilidad.
La palabra «coraje» es muy interesante, ser valiente significa vivir con corazón. Los cobardes y sólo los cobardes viven con la cabeza; están atemorizados, se rodean de la seguridad de la razón. Atemorizados, cierran todas las ventanas y las puertas y se esconden detrás.
El camino del corazón es el camino del coraje. Es vivir en la inseguridad, es vivir con amor, con confianza; es adentrarse en lo desconocido. Es renunciar al pasado y permitir el futuro. Coraje es adentrarse por caminos peligrosos. La vida es peligrosa, y sólo los cobardes pueden evitar el peligro, pero entonces, ya estarán muertos. La persona que está viva, realmente viva, vital, siempre se aventurará a lo desconocido. Allí encontrará peligros, pero se arriesgará. El corazón siempre está dispuesto a arriesgarse, al corazón le gusta apostar. La cabeza es un hombre de negocios. La cabeza siempre hace cálculos, es astuta. El corazón no es calculador.
Es necesario ser muy valiente para desarrollar tu destino, no hay que tener miedo. Las personas que están llenas de miedo no pueden ir más allá de lo conocido. Lo conocido da una especie de comodidad, seguridad, confianza, porque lo conoces. Estás perfectamente informado, sabes cómo abordarlo. Puedes estar casi dormido y seguir haciéndolo, no necesitas estar despierto; es la ventaja que tiene lo conocido. Pero una persona que está imposibilitada para lo nuevo está muerta.
Sólo se puede vivir la vida peligrosamente, no hay otra forma de vivirla. La vida sólo alcanza la madurez y el crecimiento a través del peligro. Tienes que ser un aventurero, siempre dispuesto a arriesgar lo conocido por lo desconocido. Y en cuanto hayas probado la alegría que produce la libertad y la ausencia de miedo, nunca te arrepentirás, porque sabrás qué significa vivir al máximo. Sabrás qué significa quemar la antorcha de tu vida por los dos extremos. Un solo instante de esa intensidad es más gratificante que toda una eternidad de vida mediocre.

Enseñanzas de Alejandro Jodorowsky, Osho, Ernesto Sábato, Alexander Supertramp, etc., etc., etc. todo mezclado.