lunes, julio 31, 2006

Ya nada me hace falta...


¿Hacia dónde debemos apuntar nuestras miradas? O nuestros corazones. Si al menos no me quebrara día a día pudiera hacer algo que valga realmente la pena. O transformarme en grano de arena y así poder ser parte de un Todo. ¿Quién contestará mi llamado? ¿En quién creo? Aunque todavía no lo sepa sigo en pie. Fiesta embriagada y delirante. ¿Quién dio la orden de cambiar el Mundo? Ya nada existe ni me hace falta. Nada más que algunos óleos, un tocadiscos, una galera, un colchón y diez botellas.

Obra: "A este mundo podrido ya le sale pus", Acrícilo sobre papel, 120 x 80 cm, 2006, Emilio Fatuzzo.